martes, 5 de julio de 2011

Luna llena.



Cuando parte el sol a esconderse
brillas tú, ¡ay, luna llena!,
para guiarme en la noche.

Bajo tu luz de plata se pierde,
en el horizonte, un sendero,
corto camino que lleva a la morada
donde Manrique y Fray Luis esperan.

Palmas rompen el silencio,
los gitanos cantan un bello romance
que Lorca te dedicó;
"Luna, huye", cantan ellos,
"Luna, no me abandones", ruego yo
mientras siento tu presencia desvanecerse en la mañana...

Esperaré tu regreso, ¡ay, luna llena!,
bajo la cegadora luz del día,
que muestra la cara de los hombres
pero oculta las sombras de su alma.

1 comentario:

  1. La contemplación es uno de los soportes de la poesía. Se contempla la grandeza de la naturaleza, las luces interiores, los parpadeos de la luz en en la danza de los sueños..

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